Madonna Buder, la Monja de Hierro que entrena religiosamente

Hace ya días que quería hablar de esta admirable mujer que me tiene completamente fascinada desde que conocí su historia y que ahora está en boca de muchos, tras su reciente participación en este Ironman de Hawaii. Para quién no conozca aún su historia, seguid leyendo porque no os dejará indiferentes.

La hermana Madonna Buder es una monja católica románica y la mujer más longeva en acabar un triatlón de distancia Ironman. Por si aún no habíais oído hablar de ella, su admirable currículum deportivo incluye más de 350 triatlones, ¡45 de los cuales fueron de distancia ironman! Buder nació en St. Louis, Missouri en julio de 1930, sí, sí, no me he equivocado, actualmente tiene 84 años, que impacto, ¿verdad?

A los 14 años decidió que quería ser monja para poder ayudar y servir a otra gente. Así a sus 23 años entró al convento, para unos años después dejar la congregación y reunirse con 38 misioneras de diferentes perfiles para establecer una comunidad de hermanas no tradicional. No fue hasta los 48 años cuando Buder empezó a entrenar la carrera a pie después de que el Padre John le dijera que eso sería bueno para su cuerpo y su mente. Quiso participar en carreras de running, pero ella no estaba segura que aquello estuviera bien visto, ya que entonces era la única monja que hacía algo así. Habló con el obispo y le dijo que quería correr una carrera de 13km y hacerlo por una causa, concretamente por la Esclerosis múltiple, y para ello quería su bendición y la respuesta que recibió fue: “Hermana, ya me gustaría que alguno de mis sacerdotes hicieran lo que hace usted”.

Posteriormente se afilió a un club y un día escuchó a un compañero del grupo contando que había acabado un triatlón, el Ironman de Hawaii. Hasta entonces ella nunca había participado en un triatlón y las distancias que había completado su compañero, le parecían inalcanzables. ¡Una locura! Pensó que ella nunca podría hacer algo así. Curioso, ¿verdad? ¿Quién no ha tenido ese pensamiento la primera vez que escuchó la palabra Ironman? ¡Yo, desde luego, pensé exactamente lo mismo!

No tardó mucho en completar su primer triatlón, lo hizo en Irlanda a los 52 años. Ella cuenta que fue una carrera muy dura, acortaron la natación debido a las frías aguas, ya que entonces no se utilizaban los trajes de neopreno. Consiguió una bicicleta masculina en una subasta de policía. Y superando el gran desnivel de la prueba, consiguió acabarla muy contenta. A partir de ese momento, siguió entrenando con la bici de su sobrino y aprovechaba las visitas al pueblo para visitar a sus padres para sumar kilómetros sobre las dos ruedas. Tres años después, a sus 55 años, completó su primer Ironman y tras él vinieron 45 más hasta el día de hoy.

En el Ironman Hawai 2005, ganó el título de la “Monja de Hierro”, con 75 años, obteniendo el registro de la mujer de más edad en haber completado esa prueba. Pero su gesta no acabaría aquí, ya que en 2012 se presentó al Ironman Canadá completando los 226km en 16h32´ y consiguiendo así el récord mundial de la persona (de ambos sexos) con más edad en acabar un Ironman, que entonces pertenecía a Lew Hollander, el cual había establecido el récord a sus 81 años. (Le debo una entrada especial también a este gran hombre)

Ahora el objetivo de la Monja de Hierro es conseguir este mismo récord pero haciéndolo en Hawaii. A día de hoy nadie ha podido arrebatar el récord a Lew, que lo consiguió también en 2012 con 82 años y 129 días de edad. Es sorprendente saber que nuestra heroína ha abierto 5 categorías de edad en su trayectoria, donde nadie había participado aún.

Os preguntaréis de qué manera entrena la Monja de Hierro. Según cuenta ella, tiene poco tiempo para entrenar, así que aprovecha para ir corriendo hasta la iglesia siempre que puede o recorre 65km en bici para ir a nadar a un lago. Si se levanta con tiempo, hace ejercicios de suelo para trabajar sus músculos. Lamentablemente, en el último tiempo no ha podido entrenar todo lo que le hubiese gustado debido a una caída en bici que le dejó una fractura de pelvis y de la que se ha ido recuperando poco a poco. Pero la estupenda figura que tiene Madonna no solo es fruto de su entreno, sino también de cuidar mucho su alimentación. Reconoce no comer en exceso, además de seguir una dieta cruda basada en frutas y verduras. Aunque incluye carbohidratos y proteína en polvo, para ella lo más importante es escuchar su cuerpo y darle lo que le está pidiendo, ya sea ‘carbos’ o lo que crea que necesita.

El running mantiene viva a esta mujer. Se siente en calma, en harmonía con su cuerpo y mente. Le encanta correr y adelantar a gente más joven que ella y que le digan “¡Yo quiero parecerme a usted a su edad!”. Le apasiona ser una inspiración para los demás. Me gusta como define ella un triatlón, dice que “es como una vida encapsulada”. ¿No os parece? Todos los altibajos que pasamos, las cosas buenas y las malas, superando obstáculos, como la vida misma, ¡pero concentrada! Como decía al inicio de este relato, Buder estuvo presente hace pocos días en la última edición del Campeonato del mundo Ironman en Hawaii. A sus 84 años, parece que nuestra heroína aún no tiene suficiente. Aunque probó hacer historia una vez más en esta prueba, lamentablemente no pudo ser así, pero llegó a completar los 3.800m de natación en 2h18m. y recorrió 120km en bicicleta. En ese punto se vio obligada a retirarse, quedándose sin fuerzas y posiblemente porque le pasaran factura sus últimas lesiones.

Nos quedará ver si Buder quiere seguir luchando por conseguir ese récord o ya dará por cerrada su vida triatlética. Lew Hollander, el actual poseedor de la persona con más edad en ser Ironman finisher en Hawaii, también quiso intentarlo nuevamente en esta última edición para superar su propio récord pero tampoco le fue posible, abandonando en el sector de ciclismo.

Llegados a este punto yo lanzo una pregunta. ¿Le arrastrará una fuerza Divina o su secreto radica, como bien dice ella, en que “entrena religiosamente a diario”? Desde luego que yo me quito el sombrero y solo me queda por decir que ¡ojalá yo esté como ella a su edad!

Fotos: Ironman