Nueva experiencia la vivida el pasado fin de semana en la localidad barcelonesa de Igualada en la que se disputo la prueba de BTT por etapas más longeva como es la VolCAT Igualada by Scott.
Nuevamente y gracias al reto puesto sobre la mesa de Inverse y Nutrisport en la redacción de Triatletas En Red nos calzamos las ruedas gordas para salir de la zona de confort y vivir desde dentro la dureza de la modalidad Marathon en 2 etapas exigentes tanto a nivel físico como técnico y celebrar el 20 aniversario de esta Volcat Igualada que se consolida como un lugar de peregrinaje para los amantes de la Mountain Bike.
En esta ocasión Marc y yo mismo, volvimos a participar en la modalidad OPEN por equipos y soltamos a Pau a los leones para batallar en la modalidad individual en un evento amenazado por la lluvia desde los días previos.
La etapa reina para los 700 inscritos en las diferentes modalidades y con un cartel élite espectacular en tanto que prueba UCI, nos puso a prueba con largas subidas y descensos interesantes durante todo el recorrido. Una etapa tan rompepiernas como divertida que combinaba tramos realmente técnicos con pista rápida y mucho sendero single-track.
En esta primera etapa el objetivo era reservar fuerzas para la parte final en la que debíamos remar en el llano para llegar a la meta pero la exigencia de los 1600 metros de desnivel acumulado tampoco daba para guardar mucho. Por suerte los avituallamientos con productos de Nutrisport y la amabilidad del equipo de voluntarios lo hicieron más llevadero.
Destacable también que no nos perdiéramos en ningún momento gracias a la señalización que en todo momento marcaba el rumbo correcto con la antelación necesaria para no despistarte en los tramos de bajada.
Finalmente conseguimos llegar a meta, no sin esfuerzo y disfrutar del premio final en forma de fideuá, paella y un ambiente espectacular que consiguió la organización de OCI-SPORT que os sonaran también por ser los culpables de la gestión y el éxito de la popular SEA OTTER en Girona.
Tras eso, duchas, limpieza de bici y…a descansar para la batalla final.
Albert Balcells, director del evento ya nos avisó el día antes de las “bondades” de esta segunda etapa. “Es mucho más técnico y explosivo” dijo el bueno de Balcells. Y cuanta razón tenía.
A eso sumamos que la noche del sábado al domingo llovió lo que no está escrito y, a pesar de que a la hora de la salida y durante la mayor parte del recorrido nos respetó, el barrizal en algunas zonas y la humedad en las zonas de rock garden hizo esta segunda etapa más dura y épica a partes iguales.
Las condiciones en algunos tramos unido a la exigencia técnica hizo que el porteo fuera más habitual de lo previsto en algunas zonas pero la prudencia y el “apego a la vida” hacían más que recomendable el hacer un poco el caminante en pro de disfrutar al máximo los tramos pedaleables que eran muchos por suerte. Bajadas técnicas subidas peleonas y un recorrido realmente explosivo hicieron que cruzar la meta y conseguir la medalla UCI tras completar las dos etapas tuviera este año doble mérito y si encima eres más triatleta que biker, incluso triple.
En resumen, una experiencia más que recomendable si tienes una condición física y técnica mínima para disfrutar de las ruedas gordas en un entorno perfecto para la modalidad Marathon como es la Volcat Igualada que, en 2025 seguirá sumando adeptos como nosotros. Eso si, estos bikers están más fuertes que el vinagre y nos pusieron en nuestro sitio.
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