El próximo domingo 31 de agosto, Austria se convertirá nuevamente en foco del triatlón internacional con la celebración del IRONMAN 70.3 Zell am See-Kaprun 2025. La prueba, considerada una de las más emblemáticas del circuito europeo, reunirá este año a más de un centenar de triatletas profesionales en una línea de salida de nivel.

Además de su prestigio histórico, esta edición adquiere un valor añadido: será la última parada de las IRONMAN Pro Series antes de los Campeonatos del Mundo, y al mismo tiempo una de las primeras competiciones que otorgará plazas directas para el Mundial de 70.3 en Niza 2026. Una combinación que promete máxima intensidad tanto en el agua como en el asfalto alpino.

LAS GRANDES FAVORITAS EN CATEGORÍA FEMENINA

En la categoría femenina, todas las miradas estarán puestas en la británica Kat Matthews, que llega como referencia indiscutible tras una temporada impecable. Campeona en IRONMAN Texas y en 70.3 Swansea, y subcampeona en Hamburgo —solo superada por la vigente campeona mundial, Laura Philipp—, Matthews afronta la cita austríaca con la etiqueta de gran favorita.

A su estela, la noruega Solveig Løvseth, reciente vencedora en Lake Placid, intentará romper los pronósticos y pelear por un podio de prestigio. El cartel femenino se completa con figuras de gran calibre como la alemana Anne Reischmann, campeona en Sudáfrica, y la local Lisa Perterer, decidida a aprovechar la motivación de correr en casa.

Alemania, país que ha consolidado una cantera de enorme talento en media distancia, presentará además un bloque muy competitivo con Daniela Kleiser y Lena Meißner, dos especialistas en corta distancia que destacan por su potencia en la carrera a pie.

UNA BATALLA ABIERTA EN CATEGORIA MASCULINA

La prueba masculina se presenta con un panorama más abierto y un amplio abanico de candidatos. El contingente alemán llega especialmente nutrido con nombres como Jonas Hoffmann, que acumula tres top 5 esta temporada y se perfila como uno de los rivales a batir. A él se suman Dominik Sowieja y Fabian Kraft, ambos con experiencia y solidez en pruebas internacionales.

La armada australiana también promete dar espectáculo con la dupla formada por Cameron Wurf y Nick Thompson. Este último llega en plena progresión tras su segundo puesto en el IRONMAN Cairns Airport, mientras que Wurf, sexto en la clasificación de la IRONMAN Pro Series, se ha mantenido regularmente en el top 10 a lo largo del año.

El Reino Unido contará igualmente con presencia destacada. Andrew Horsfall-Turner y Cameron Main estarán en la línea de salida, con Main consolidado como uno de los especialistas más consistentes en la media distancia tras subir al podio en el IRONMAN 70.3 Venecia-Jesolo.

A este listado de figuras internacionales se suman otros nombres ilustres como Thor Bendix Madsen, Dylan Magnien y el experimentado británico Thomas Bishop, todos ellos con capacidad de animar una carrera que promete ser imprevisible hasta el final.

ESPAÑA A POR TODAS CON VILLARRUEL Y CHENTE

La representación española recaerá en Nacho Villarruel y Vicente Hernández, dos perfiles muy distintos pero igualmente ilusionantes.

Villarruel
encara la cita austríaca inmerso en la temporada más exigente de su carrera. Tras haber completado ya cuatro IRONMAN full en este 2025, afronta un nuevo reto en una distancia que no suele ser su terreno natural. Sin embargo, su constancia y capacidad de resistencia le convierten en un valor seguro dentro del pelotón profesional.

En paralelo, Vicente Hernández, conocido por su talento en corta y media distancia, sigue dando pasos firmes en su regreso tras más de cuatro años apartado por lesiones. Con podios recientes en pruebas nacionales como Zarautz y una buena progresión en 70.3, el tinerfeño buscará en Zell am See consolidar su recuperación y, por qué no, sorprender entre los favoritos.

CAMINO A NIZA 2026: MÁS QUE UNA CARRERA

Más allá del prestigio inmediato, la cita de Zell am See marcará el inicio de la carrera por los slots para el Campeonato del Mundo IRONMAN 70.3 de 2026 en Niza. Con cada plaza en juego, la motivación de los atletas será máxima, ya que una clasificación temprana permitiría planificar la temporada con mayor tranquilidad y objetivos más ambiciosos.

Así, el próximo domingo Austria será testigo no solo de una de las pruebas más bellas y exigentes del calendario, sino también del primer gran capítulo hacia el Mundial 70.3 del año 2026.