La australiana recupera su hegemonía en el circuito T100 tras una brillante remontada en el tramo final
Ashleigh Gentle siempre ha sido sinónimo de superioridad en el circuito T100, teniendo triunfos y un dominio que le hizo ser la referente en esta distancia. Sin embargo, su temporada 2025 había estado lejos de aquel esplendor que la distinguió durante años. Eso cambió en la soleada Riviera Francesa, donde la triatleta australiana firmó una actuación memorable que la devolvió a la cima con una victoria categórica en el T100 Riviera Francesa.
UN INICIO MARCADO POR LA NATACIÓN BRITÁNICA
La prueba comenzó en el mar con un ritmo implacable impuesto por Jessica Learmonth, que registró un sólido parcial de 26:38. La británica abrió brecha desde el principio y solo su compatriota Georgia Taylor-Brown consiguió mantenerse en un rango competitivo, saliendo del agua a tan solo 24 segundos.
Un poco más atrás, la joven suiza Alanis Siffert encabezaba un compacto grupo perseguidor de nueve triatletas, mientras que la canadiense Paula Findlay, una de las favoritas, quedaba rezagada con más de dos minutos de desventaja al completar la primera transición.
EL GOLPE DE AUTORIDAD EN EL SEGMENTO CICLISTA
La carrera dio un giro estratégico en el tramo de bicicleta. Learmonth y Taylor-Brown se aliaron al frente, tratando de consolidar su ventaja. Sin embargo, un nutrido grupo de perseguidoras —entre ellas Gentle, Siffert, Hannah Berry, Lucy Byram e India Lee— mantenía la presión constante a poco más de un minuto.
El verdadero punto de inflexión llegó en la ascensión más exigente del recorrido. Allí, Siffert, reciente vencedora en pruebas de resistencia como el Triatlón de Alpe d’Huez y el Embrunman, demostró carácter y valentía. La suiza lanzó un ataque demoledor, soltó a todas sus rivales y alcanzó la segunda transición con casi dos minutos de ventaja sobre el grupo perseguidor, que incluía a Taylor-Brown, Learmonth y Berry.
LA CARRERA A PIE: EL REGRESO DE GENTLE
Si bien Siffert salió a correr con la ilusión de mantener su liderazgo, el guion se reescribió rápidamente. Taylor-Brown recortó diferencias con paso firme y tomó la delantera alrededor del kilómetro cinco. Sin embargo, detrás se aproximaba la verdadera amenaza: Ashleigh Gentle.
La australiana, acompañada por Findlay, Berry e India Lee, comenzó a imponer su ritmo característico, cada vez más fuerte y constante. A diez kilómetros de la meta, Gentle ejecutó su movimiento decisivo: adelantó a Taylor-Brown y se escapó en solitario, desplegando la seguridad y la fluidez que la habían convertido en referente mundial.
UNA VICTORIA DE AUTORIDAD Y UN PODIO DE LUJO
Gentle cruzó la meta con un registro de 3:41:42, una actuación impecable que selló su regreso a la élite. Con ello, no solo conquistó la Riviera Francesa, sino que también envió un mensaje contundente al resto del circuito: “estoy de vuelta”.
Por detrás, Paula Findlay, que había remontado con una gran carrera a pie tras un inicio complicado en el agua, se hizo con la segunda posición en 3:42:33. El podio lo completó la británica India Lee, consistente en todas las disciplinas, con un tiempo de 3:43:21.
MARTA SÁNCHEZ, ROZANDO EL TOP 10
La española Marta Sánchez ha conseguido terminar la carrera en el puesto 11 en una carrera con un nivel altísimo y sigue centrada en su objetivo principal, el Mundial IRONMAN de Kona.
UN TRIUNFO QUE REAVIVA LA TEMPORADA
La victoria de Ashleigh Gentle no solo supone un logro personal, sino que también reconfigura la dinámica del circuito T100. Tras un inicio de año irregular, su triunfo en la Riviera Francesa reabre el debate sobre su capacidad de recuperar el dominio que ejerció en temporadas anteriores.
Con varias citas importantes por delante, el duelo entre veteranas consagradas y nuevas figuras emergentes promete mantener en vilo a los aficionados. Y por ahora, la australiana ha recordado al mundo por qué fue, y puede volver a ser, una de las dominadoras de las T100.