El triatleta británico ha dado un golpe de autoridad en la pista, pulverizando su mejor marca personal.

El campeón olímpico de triatlón Alex Yee volvió a dejar claro que su talento trasciende disciplinas. En la reunión internacional de atletismo IFAM de Oordegem (Bélgica), el británico logró detener el cronómetro en 13:13.89, recortando más de 15 segundos a su mejor marca anterior en la distancia. Este tiempo lo consolida como uno de los corredores más rápidos del mundo en pista, pese a no ser su especialidad principal.

DE LA MARATÓN AL TRIATLÓN…Y A LA PISTA

La temporada 2025 de Yee ha estado marcada por la versatilidad. A comienzos de año aparcó el triatlón para perseguir un objetivo importante: debutar en el Maratón de Londres. Allí firmó un impresionante 2h11:08, lo que le valió para obtener la 14ª posición en la élite masculina. Posteriormente, regresó a la triple disciplina con un triunfo rotundo en la apertura de la temporada de la Supertri en Toronto, demostrando que su velocidad seguía intacta.

UN ESCENARIO CON HISTORIA

Oordegem no es territorio desconocido para Yee. En 2017 ya había corrido allí para registrar la mejor marca de un júnior británico desde 1981, con 13:37.60. Dos años más tarde, en una prueba de la ‘Diamond League’, en Londres, rebajó ese tiempo a 13:29.18.

Ahora, seis años después, vuelve a Bélgica para firmar su mejor registro hasta la fecha, con un ritmo medio de 2:39 por kilómetro y un fuerte acelerón en la segunda mitad de la prueba.

CONTEXTO DE UNA MARCA DE ÉLITE

Aunque todavía lejos del récord británico absoluto —establecido en 12:45.27 por George Mills este mismo año, rompiendo la histórica marca de Mo Farah—, el tiempo de Yee lo coloca en una élite muy reducida de corredores británicos capaces de bajar de 13:15.

En Instagram, el propio atleta restó dramatismo al logro, señalando que fue “una primera mitad táctica” y que, pese a quedar último en su serie, estaba satisfecho con el resultado.

MIRANDO A LA RIVIERA FRANCESA

Con este nuevo hito, Yee se prepara para su próxima gran cita: las series mundiales de la Riviera Francesa, el 31 de agosto. Allí podría medirse nuevamente con su gran rival, el neozelandés Hayden Wilde. Este último protagonizó este sábado una de las historias más sorprendentes del deporte al volver a competir menos de 100 días después de ser atropellado por un camión en Japón, llevándose además la victoria en el T100 de Londres.

https://youtu.be/hnavuZinpJ8?si=YEGB3OZrqoz1jdTI