Es importante haber conseguido la primera prueba de la franquicia a nivel internacional, pero sin despreciar el nivel de Malta es evidente que no era la carrera con más nivel. Entre otros, faltaban Ruzafa, Carloni, Ben Allen o algunos belgas. Aún así, el segundo era una buena referencia. Hace ilusión ganar una prueba, pero no es mi objetivo. No busco ganar carreras. Estoy disfrutando del día a día que llevo, entrenando y compitiendo como un profesional. Se donde está mi nivel y se donde está el de mis rivales, pero aún así estoy contento por la repercusión internacional que ha tenido mi victoria para mis patrocinadores.
El día 1 compito en el Subaru Triathlon Cross de Calella, y la siguiente prueba ya será el XTERRA de Grecia el día 7 de mayo. Para cerrar el primer ciclo de la temporada competiré en XTERRA Portugal y me tomaré un pequeño descanso. Luego participaré en el Bilbao Triathlon de media distancia y decidiré qué camino seguir. Todavía tengo que pensarlo.
Ya veremos. Mi nivel de este año es muy superior al del año pasado, pero tengo que ver el nivel de mis rivales. Quiero ver si han subido tanto como yo. En estas primeras carreras del año veré si tengo opciones de ir a Maui para acabar entre los cinco primeros. Lo que tengo claro es que o me subo al podio o no me vale la pena entrenar tantos meses con un verano por medio. Tampoco el acabar temporada tan tarde. Y el último XTERRA importante en Europa es en septiembre. Si no voy a Maui no tendré que viajar tanto y podré descansar mejor para afrontar 2017 con garantías, empezando la pretemporada en noviembre.
Eso es lo que no me acaba de convencer. Estoy trabajando con Iván con el objetivo de transformar mi cuerpo, cambiando la forma de entrenar y de competir. No preparo ninguna carrera de forma específica por ahora. Estamos haciendo un trabajo a muy largo plazo, con vistas a tres o cuatro años. No me interesa gastar cartuchos ni intentar ganar carreras ahora. Eso me provocaría dolores de cabeza y lesiones, por supuesto. Ahora toca acumular base y acumular experiencia, y hacerlo durante doce meses es muy difícil.
Exacto. No me compensa preparar carreras ni tampoco empezar el año en Sudáfrica en febrero y acabarlo en noviembre en Maui. Eso me provocaría lesiones y problemas de cara al futuro. Soy muy serio en mi trabajo y en el futuro quiero ser uno de los mejores corredores de XTERRA. Así que ahora tengo que ‘currarme’ la base e intentar entrar en el juego de ganar carreras con 24 años. Toca esperar a ganarlas con 26 o 27, pero mientras, trabajar la base. Algunos están perdiendo semanas y bloques de entreno por lesionarse o sobreentrenar. Y a cierta edad eso pasa factura.
Sí, en este sentido es así. Un tipo calmado y una referencia deportiva en cuanto a filosofía. Siempre guarda un punto y nunca hace locuras. Va relajado y eso te daría una proyección de cara al futuro. Y actualmente tengo esa proyección a largo plazo gracias al apoyo de sponsors como MyProtein.
Es un tema que hemos hablado muchas veces con XTERRA. Creemos que los profesionales tendríamos que tener una carrera a parte y con modalidad de vueltas. No es posible filmar una carrera por circuitos como los de XTERRA. Con pocas cámaras fijas se puede cubrir un evento así. Y los patrocinadores crecen exponencialmente. Creo que una de las claves para potenciar nuestra disciplina sería así. Pero por ahora no han cambiado las cosas. Eso sí, es un deporte tranquilo, por la montaña y sin aglomeraciones. Es otro rollo. Pero es muy triste que en España no haya una prueba XTERRA internacional teniendo al cinco veces campeón del mundo y al actual campeon del XTERRA European Tour.
Hay varios puntos a tener en cuenta. Según tus características puedes optar por neoprenos con mayor o menor flotabilidad, en función de tu nivel de natación. Cuando son más flexibles y con mayor libertad de movimientos tienen menor flotabilidad y no vas a ir tan rápido. Más flotas, más rápido vas. El neopreno también se utiliza, entre otras cosas, para no pasar frío.
Este año utilizaré el Orca Predator. Por mis características como ex nadador que ahora no hace tantos metros, es una alternativa flexible y con buena flotabilidad. El Predator es una obra de la ingeniería, es flexible pero tiene un gran nivel de flotabilidad. Aún así, para la gente de ‘a pie’ existen otras gamas de neopreno que sirven para potenciar las debilidades de cada nadador.
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