Muchos han sido los triatletas españoles que han dejado huella de una manera u otra en esta prueba francesa de los Alpes, marcada por la dureza. Y sin duda Víctor Del Corral es uno de ellos. Él mismo nos cuenta los recuerdos que guarda.

del corral 1Con la cara visiblemente emocionada y el cuerpo maltrecho por el cansancio. Así llegó a la meta del Triathlon EDF Alpe d’Huez el triatleta catalán allá por 2011, en la que fue su primera victoria en un triatlón de larga distancia. Y es que, si el debut en esta prueba es siempre complicado dadas las características que le rodean, hacerlo ese año aún lo fue más. La lluvia y el frío (ese frío típico de la alta montaña que no entiende de estaciones) fueron fieles acompañantes de los participantes que ese año disputaron la competición. Así que la victoria para Víctor fue, si cabe, aún más especial.

“La recuerdo como una edición dura y bastante complicada. Estuvo lloviendo, hizo frío, había niebla en los puntos más altos… El hecho que fuera además mi primera victoria en larga distancia le dio un toque especial a la victoria” destaca el triatleta. Un año muy positivo a nivel de resultados ya que, además de la victoria en Alpe d’Huez, Víctor consiguió otros grandes títulos: ganador del ranking mundial de duatlón y campeón de España y de Europa de triatlón cros.

En 2012, Víctor volvería a repetir título en este particular templo del triatlón, aunque esta vez en unas condiciones diferentes, sin duda más favorables: “Esta vez el tiempo nos respetó en Alpe d’Huez y fue más agradable, con sol y buena temperatura. Recuerdo que ese año venía de ganar Ironman Lanzarote. Sin duda, el Triathlon EDF Alpe d’Huez es siempre una carrera importante para mí“.

Una carrera “muy dura pero bonita, a la que siempre es un placer volver. Del sector de natación el agua siempre está muy fría. Pese al neopreno, el hecho de tener que nadar algo más de 2 km y estar a unos 800 metros de altitud marca, y siempre pasas frío. Además, la primera parte de la bici es en bajada y no ayuda a entrar en calor. Siempre cuesta poner a tono el cuerpo tras la natación” explica el catalán.

Pero si el sector de natación es exigente, no lo es menos lo que viene después: “El circuito de bici es duro. Antes de subir el mítico Alpe d’Huez ya has hecho varios puertos y llevas bastantes kilómetros en las piernas y tirar adelante es complicado. Y la carrera a pie también es dura y complicada porque estás corriendo a 1.800 o 2.000 metros, también con desnivel, y ya vas muy castigado” argumenta.

Una prueba a la que Víctor Del Corral le tiene mucho aprecio y donde ha gravado algunas de sus mejores actuaciones, que afortunadamente han sido muchas. Y es que, además de los centenares de triatletas populares que se dan cita cada año en esa zona de los Alpes, la participación de grandes figuras del triatlón mundial como Víctor es lo que hace de la prueba una de las más grandes.

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