El francés y su entorno confirman nuevos problemas de salud y desatan de nuevo la preocupación entorno al campeón del mundo.
«Si algo puede salir mal, saldrá mal.» es el principio y ley que rige la vida de Sam Laidlow desde el mes de octubre. Si el galo no tuviera suficiente con batallar con una enfermedad de origen desconocido y de la que recientemente han obtenido las primeras pistas, ahora vuelve a encarar momentos difíciles al detectarle “un parásito” en su estómago para el que acaba de comenzar un tratamiento con antibióticos.
“El siguiente plan es tomar estos antibióticos y luego, con suerte, averiguar qué demonios me pasa. Pero ahora mismo solo estamos intentando matar este parásito que tengo en el estómago” ha comentado frustrado Laidlow en su último vídeo donde también ha hecho hincapié en el impacto de esto en los problemas de su débil sistema inmunológico. algo a lo que ya había aludido anteriormente “Tengo las defensas muy bajas, así que sigo enfermando, pero llevo meses con esto“.
“SIMPLEMENTE LOGRAR QUE VUELVA A ENTRENAR Y COMPETIR YA ES UNA META”
Un nuevo contratiempo que agrava una situación de por si delicada y del que por primera vez se ha pronunciado el padre y entrenador del triatleta, Richard Laidlow. “Es un momento muy estresante”.
“No voy a mentir, hay muchas preguntas sobre por qué no puede entrenar como debería en este momento. Pero tenemos un buen equipo que nos respalda, así que ojalá encontremos una solución”. Fe en la ciencia y en el equipo médico que les rodea por parte del progenitor que también expresó semanas atrás el propio Sam, quien ya entonces avisó que recuperar su salud al 100% pasaba a ser la meta principal para 2025.
En la misma línea se expresaba su padre “El objetivo es simplemente que se ponga en movimiento”. Algo que Laidlow lleva sin poder realizar en condiciones desde hace casi seis meses y para lo que Richard no se atreve a vaticinar una fecha. “Es difícil predecir cuándo recuperará su mejor forma física”.
“EL OBJETIVO ES ROTH” : EL TERMÓMETRO DEFINITIVO DE 2025
Otro golpe a su ya mermada salud física pero también mental cuya consecuencia directa y esperada ha sido la confirmación de su no participación tanto en Ironman Sudáfrica este próximo 30 de marzo – el evento con el que pensaba arrancar el curso antes de que sucediera esta catarata de acontecimientos – como en Challenge Sir Bani Yas una semana después.
No obstante, en este constante ‘una de cal y otra de arena’ en el que viven inmersos, Laidlow y su equipo no han tirado la toalla respecto a su recuperación y depositan todas sus esperanzas en su recientemente anunciada presencia en Challenge Roth el 6 de julo, tal y como manifiesta Richard: “El objetivo es que vuelva a tener una buena carrera en Roth”.
UN HALO DE OPTIMISMO CON NIZA EN EL HORIZONTE
De lo que en la ‘Casa del Triatlón’ suceda (o deje de suceder), dependerá cómo se articula el resto de la temporada de quien se proclamara en 2023 campeón del mundo Ironman en Niza, una cita a la que Laidlow desea regresar para defender su título en casa, pero para la que todavía debe validar su lugar.
Por el momento, el tiempo y las circunstancias corren en su contra. Sin embargo, el francés ha dejado un pequeño hueco al positivismo al mostrar su regreso a la piscina y a la pista de atletismo al final del vídeo.