Lionel Sanders cree saber el motivo de su mal resultado en el pasado Kona y ya parece tener clara la solución para volver a ser competitivo.
El pasado sábado en Kona, no fue un buen día para Sanders. Con su experiencia en la isla y el 2º puesto en el mundial de St. George, a pesar de la mala carrera en Dallas, el triatleta de CANYON partía como uno de los favoritos, pero acabó cruzando la meta en la 34ª posición. Muy lejos de su objetivo —ganar.
Sin fuerzas para subirse en el tren
Solo 3 triatletas quedaban en el agua cuando Sanders entró en la transición, a 4min43seg de cabeza, pero con la compañía de Kienle, Wurf, Skipper y Chevalier. Parecía que era el tren perfecto para Sanders, con el que llegaría a las primeras posiciones, pero se quedó descolgado ya en los primeros metros.
“Supe en el momento en el que me subí a la bici que no iba a ser un día fácil”, comenta Sanders en su último video. Desde ese instante, su intención durante el resto de carrera era simplemente ir fácil hasta el kilómetro 32 de la maratón y después correr un poco más rápido, pero ni eso fue posible.
¿En duda el método noruego?
“Estaba agotado, realmente agotado, no tenía capacidad para empujar”, explica el canadiense. Tan solo pasaron 24 h de la carrera cuando grabó el video, pero Sanders ya cree saber el motivo de sentirse así: Los numerosos IM que ha realizado en los últimos 15 meses, entrenar muy duro, y no descansar lo necesario. “Creo que a lo mejor hemos intentado emular o copiar el sistema de entrenamientos de Gustav y Blummenfelt y no sé si eso es lo mejor para mí”.
También se ha pronunciado respecto a la subida de nivel y las críticas que ha estado recibiendo por su rendimiento. Lionel piensa que no va a poder ser competitivo al nivel de los noruegos en un IRONMAN, hasta que no lo sea también en 70.3, por eso se está planteando dejar de correr Campeonatos de IRONMAN hasta que no consiga mejorar, sobre todo su natación, en la media distancia.
Nuevo objetivo: Ditlev
Esto no es nuevo en él, en 2016 ya lo hizo. En 2017 no compitió en IM hasta que no consiguió nadar en un 70.3 con Kienle, lo cual acabó consiguiendo y le ayudó a acabar 2º ese mismo año en Kona. Ahora, con el aumento de nivel, nadar con Kienle no es suficiente, por lo que su nuevo objetivo es Ditlev. Considera que el danés es el corte para subirse a la bici con posibilidades de luchar contra Iden o Blummenfelt.
Veremos que tal sale este nuevo cambio de rumbo. Por ganas no será.
