Foto: Núria Guirado
Un cielo nublado recibió a los prácticamente 3.000 triatletas que participaron en la tercera edición de Ironman Barcelona, con buena temperatura que hacia que el uso del neopreno fuera opcional para los populares y estuviera prohibido para los pro’s.
El balear Carlos López, que venía de ganar Ironman Mallorca hace ocho días y especialista en el agua, mandó en el primer sector de la carrera, seguido de cerca por el holandés Mark Oude Bennink. Por detrás, un denso grupo perseguidor con Patrik Nilsson, Miquel Blanchart y Xavier Torrades.
Pero en una prueba como es el Ironman, el largo y exigente sector ciclista siempre es un escenario dado a los movimientos y las sorpresas. Así pues, Johann Ackermann, Mark Oude Bennink y Bas Diederen tomaban la delantera durante las dos vueltas enteras que tenían que completar los participantes por la nacional, entre Calella y Montgat. Un ritmo sólido que permitió al trío cabecero mantener ventajas respecto sus perseguidores, entre los que estaba Miquel Blanchart.
De hecho, la primera media maratón fue suficiente para que el sueco Nilsson, con un ritmo constante superior al resto, remontara hasta la segunda posición, amenazando al líder momentáneo, Oude Bennink. Por detrás, Blanchart ja era quinto.
Y la segunda mitad de carrera serviría para certificar el liderato de Patrik Nilsson, que acabaría por llevarse la victoria con 7h 55’28. Segundo sería el ruso Ivan Tutukin y tercero Miquel Blanchart, que le arrebataba el podio al alemán Ackermann en el último kilómetro.
De este modo, Nilsson certifica dos meses perfectos, donde ha ganado los Ironman de Copenhagen y Barcelona, y en ambos bajando de las 8 horas. Sin duda, un triatleta con nivel Kona. Además, deja a mejor vida el hasta ahora récord de la prueba, en manos de David Plese con 8h 02’20.
Por lo que a categoría femenina se refiere, los pronósticos parecían acertar al afirmar que Lucie Zelenkova era la favorita para llevarse el título en este Ironman Barcelona. La checa, afincada en Sudáfrica, salió primera del agua 3 minutos antes que sus perseguidoras. Aún así, pese a ser conocedora del circuito, ganó en 2010 y quedó 2ª en 2013 (Challenge), vio escapar su título encima de la bici.
Justamente era en la carrera a pie donde Stienen nos brindó un recital. La alemana disputó un tercer sector con paso firme, decidido y sobre todo seguro. La distancia con Watkinson cada vez era mayor, el ritmo de Stienen era vertiginoso y fue ese mismo el que la llevó a lo más alto del podio con un tiempo de 8h 54’27.
La espectacular remontada de Lisi Gruber en la carrera a pie no le sirvió para llegar a luchar por el oro, pero sí por la plata (ya fue tercera en 2015). Con 9h 05′ 52, superó a la sudafricana Watkinson, que cerró el podio del Ironman Barcelona 2016 con 9h 12’13.
Informan David Giménez y Núria Guirado.
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