El triatleta vasco da por concluido el año tras unas molestias en la espalda que le impedirán competir en Ironman Arizona, donde ya estaba inscrito.
“12’28” ha durado el que seguramente sea el último entreno de carrera a pie de mi temporada”. Así empezaba el escrito que colgó en sus redes sociales Eneko Llanos el viernes, donde anunciaba que daba por concluido el 2016. El culpable, un intenso dolor de espalda que arrastra de una caída en bici que sufrió hace 10 días cuando volvía a casa tras un entreno.
Las molestias provocan que Eneko vaya a perderse un potente objetivo de este final de año, que muchos desconocíamos. Eneko tenía previsto disputar el Ironman Arizona del próximo 20 de noviembre, donde de hecho ya estaba inscrito. Ahora el vasco termina el año pero, como él mismo reconoce, ya piensa en 2017.
Así pues, su última carrera del año fue la 27º posición del Campeonato del Mundo Ironman de Hawái tras muchos problemas en la maratón (problemas que viene arrastrando desde hace ya varias pruebas).
Anteriormente a Kona, Eneko consiguió una positiva tercera posición en el Campeonato de Europa Ironman de Frankfurt así como su 11º txapela en el Triatlón de Zarautz, una contundente victoria en el Triatlón de Elche-Arenales, un 13º lugar en Ironman Texas y un 5º en Ironman 70.3 Oceanside.
Unos grandes resultados los suyos que seguro querrá repetir y mejorar en 2017.
