El llamado a ser el próximo dominador en todas las facetas del ciclismo, nos cuenta cómo abordó el confinamiento

Casi nadie en la historia del ciclismo, se ha plantado en su segunda temporada como pro, con un palmarés como el de Remco Evenepoel.

Un chaval tocado por la vara del deporte, puesto que hace cuatro años, aún tenía una carrera prometedora como futbolista. Convocado para la selección belga en la categoría sub15 y sub16, por lo que su ascenso hasta conseguir una plata en el mundial de crono ha sido la definición de ‘meteórico’.

Un jóven dotado de una mente, que como a cualquier ciclista, el confinamiento ha sido un test de dureza mental para salvar los muebles de una temporada atípica, que el belga ha anunciado que pretende luchar en el máximo de citas posibles.


Entrenar, descansar y disfrutar el tiempo con mi familia: de esto se trataba el confinamiento para mí. Por la mañana siempre hacía algunas horas de entrenamiento, volvía a casa, comía un poco, descansaba por la tarde y luego cocinaba un poco con mi novia para cenar. También jugaba a la PS4 de vez en cuando y veía algo de Netflix. Me terminé las siete temporadas de “Sons of Anarchy”, una gran serie que realmente me gustó y recomiendo a otros que vean.

También completé el desafío del Kapelmuur, que surgió cuando estaba pensando en hacer algo inusual. Para mí, Muur-Kapelmuur es la escalada más famosa en todo Flandes, esos adoquines tienen tanta historia y han sido testigos de muchos momentos memorables, y como no está muy lejos de mi hogar, fue muy fácil organizar todo e ir allí con mi bicicleta y hacer la vuelta completa de 3 km… hasta 50 veces.

Una semana en la vida de Remco Evenepoel

El día fue muy agradable, tuve buen clima, sin viento, sin nubes, solo sol. Comencé bastante temprano, porque sabía que me tomaría un tiempo completar el desafío. No mentiré, tuve que superar un momento difícil después de 30 vueltas, porque sentía que me estaba acercando cada vez más al final, cuando en realidad todavía tenía muchos kilómetros por delante. Solo para os hagáis una idea, me llevó alrededor de una hora hacer ocho vueltas, así que al final pasé sobre el sillín unas 6 horas y 20 minutos.