Esto es lo que dice la ciencia sobre las razones de peso por las que ejercitarse con sol, horas de luz o estabilidad climática es una combinación de éxito para la salud y trabajo de los triatletas.

Cassandre Beaugrand es la última en sumarse a la lista de triatletas que elige una ciudad mediterránea para entrenar y no le faltan razones para ello. La suavidad de sus inviernos y especialmente su elevado número de días soleados en contraste a los lluviosos trae consigo una serie de ventajas que ahora exponemos.

  1. FORTALECIMIENTO DEL SISTEMA TRAS LA OPTIMIZACIÓN DE LA VITAMINA D POST EXPOSICIÓN AL SOL


La exposición al sol es sinónimo de síntesis de vitamina D en la piel. Una vitamina que tal y como argumenta la profesora de radiación atmosférica en la Universidad de Mánchester, Reino Unido Ann WebbContribuye a mantener un sistema inmunológico eficiente ante las enfermedades” y que tal y como añade Andy Romero-Birkbeck, fundador de We Are Wellbeing también “ayuda a la salud ósea”.

A nivel deportivo, y más allá de las bonanzas anteriores, una adecuada producción de Vitamina D puede ser fundamental para evitar lesiones y mejorar la fuerza muscular.

  1. MEJORA DEL SISTEMA CARDIOVASCULAR Y DE LA RECUPERACIÓN


Según un estudio del Journal of Applied Physiology la exposición al sol ayuda a aumentar la circulación sanguínea y la oxigenación de los músculos. Un hecho que comporta, por un lado, el mejorar la condición cardiovascular y, por otro, acelera la reparación de los tejidos después de entrenamientos intensivos. Además, el calor moderado puede actuar como un relajante natural, ayudando a aliviar la rigidez muscular y reduciendo la fatiga general.

  1. REDUCE EL ESTRÉS Y MEJORA EL ESTADO ANÍMICO


Salir a entrenar al aire libre reduce los niveles de estrés y mejora la salud mental. Dos beneficios a la que la variedad de paisajes del mediterráneo también contribuye al evitar la monotonía y que a su vez es clave para mantener la motivación y concentración en los entrenamientos.

  1. MEJORA DE LA CALIDAD DEL SUEÑO


Vivir en el Mediterráneo y sur de Europa es gozar de unos días largos y llenos de luz natural de los que no gozan en otras ubicaciones. Por eso, aprovechar esa luz y una correcta exposición a ella origina un triple beneficio en efecto dominó: ajustar los horarios de descanso y las rutinas de sueño permite regular el ritmo circadiano y finalmente mejorar tu calidad del sueño y optimizar los procesos de recuperación.

  1. ESTABILIDAD Y ADAPTABILIDAD EN LA PLANIFICACIÓN DE LOS ENTRENAMIENTOS


El clima benévolo garantiza una mayor duración de la temporada al aire libre lejos de las cuatro paredes, pero, sobre todo, la ausencia de sorpresas climatológicas desagradables, permite dotar de una mayor fiabilidad al plan de entrenamiento. Lo que se traduce en una precisión superior de estos y una ausencia de variaciones y ajustes sobre la marcha, especialmente de aquellos específicos, de alta intensidad o de resistencia.