La temporada 2025 deja buenas sensaciones dentro de Challenge Family. El circuito cerró el año con más pruebas, más participación y una apuesta clara por mantener su identidad en un momento en el que el triatlón vive muchos cambios.
En total, la franquicia organizó 32 eventos en todo el mundo, incorporando nuevas sedes y logrando un aumento del 18 % en el número de inscritos respecto a 2024.


UN AÑO CON ESCENARIOS DIFERENTES

Si algo dejó claro 2025 es la variedad de experiencias dentro del calendario de Challenge. Hubo pruebas con tradición y foco mediático, como Challenge Roth, donde volvió a brillar Sam Laidlow, y otras que destacaron por su entorno o formato.
Carreras como Challenge Sir Bani Yas ofrecieron recorridos muy distintos a lo habitual, mientras que Challenge Almere-Amsterdam dejó uno de los desenlaces más ajustados de la temporada.

MÁS MUJERES Y MÁS JÓVENES EN LA SALIDA

Uno de los cambios más visibles del año estuvo en el perfil de los triatletas. La presencia femenina siguió creciendo en todo el circuito y alcanzó cifras especialmente altas en The Championship, donde las mujeres representaron el 37 % del total.
También se notó un relevo generacional cada vez más claro. La llegada de atletas jóvenes se vio impulsada por una iniciativa de Challenge que ofrecía precios reducidos a estudiantes de entre 17 y 23 años, facilitando el acceso a quienes dan sus primeros pasos en la media y larga distancia.

MANTENER PRECIOS Y CUIDAR EL AMBIENTE

A pesar del aumento general de costes en el deporte, Challenge Family optó por no disparar el precio de las inscripciones, manteniéndolas por debajo de la media del mercado, una decisión que tuvo buena respuesta entre los participantes.
Además, muchos eventos conservaron elementos que ya son seña de identidad de la marca, como las fiestas de bienvenida, pensadas para crear comunidad y no limitar el fin de semana solo a competir.

UN CIRCUITO QUE TAMBIÉN PIENSA POR DENTRO

El trabajo de 2025 no se quedó solo en lo visible ya que, a nivel interno, la organización reforzó la coordinación entre pruebas con una reunión anual de directores en Šamorín, centrada en mejorar procesos, compartir experiencias y unificar estándares.
También se aumentó la inversión en comunicación y control de calidad, buscando que el nivel de las carreras sea más homogéneo en todo el calendario internacional.

OPORTUNIDADES PARA NUEVOS NOMBRES… Y PARA LOS DE SIEMPRE

El circuito volvió a servir como plataforma tanto para atletas emergentes como para figuras consolidadas. Varios profesionales lograron en 2025 sus primeras victorias, mientras que nombres reconocidos como Frederic Funk, Vincent Luis o Laura Philipp siguieron sumando protagonismo.
En Challenge Almere-Amsterdam, Will Draper y Daisy Davies se llevaron el título europeo de larga distancia, reforzando el peso competitivo del circuito.

MIRANDO YA A 2026

Con el cierre de la temporada, Challenge Family
ya trabaja en el próximo año. El calendario incluirá ediciones conmemorativas, una nueva prueba de larga distancia en Québec y mejoras en la experiencia. La idea es clara, seguir creciendo, pero sin perder el trato cercano, la variedad de escenarios y el ambiente que muchos triatletas asocian al sello Challenge.